Betacort®
Principio activo:
Betametasona
Usos:
se recomienda para el tratamiento de procesos inflamatorios no purulentos debidos a traumatismos en músculos, articulaciones y estructuras relacionadas: Artritis, bursitis, carpitis, tendinitis, sinovitis y espondilitis. También está indicado en cetosis primaria de los bovinos (acetonemia). En perros y gatos en el tratamiento de asma de origen alérgico. BETACORT es eficaz en afecciones de piel, como eczema, alopecia, prurito inespecífico de los perros y dermatosis alérgicas en gatos, perros, caballos y bovinos. BETACORT está, igualmente, indicado en procesos de fotosensibilización del ganado y shock anafiláctico. Por su acción gluconeogénica, BETACORT es coadyuvante de primera elección en el síndrome de vaca caída.
Especies:
Bovinos, equinos, porcinos, caninos y felinos
Dosis:
Bovinos: 0.04 a 0.08 mg por kg de peso en la práctica de 2-4 mL por cada 100 kg de peso al día, durante 3 a 5 días; en cetosis a la dosis intramuscular es de 20 mg (10 mL) y la dosis intravenosa es de 10 mg (5 mL) diluída en 400 – 500 mL de solución glucosa (10 – 40).
Equinos: 2.5 a 5 mg día por 3 a 5 días; en la práctica 1- 2.5 mL al día.
Caninos: 0.07 mg a 0.14 mg por kg de peso; en la práctica de 0.04 a 0.07 mL por kg de peso vivo al día.
Felinos: 0.125 – 0.5 mg día por 3 a 5 días; en la práctica de 0.1 a 0.3 mL al día.
Porcinos: 2.5 a 5 mg día por 3 a 5 días; en la práctica 1 – 2.5 mL al día.
Contraindicaciones:
No administrar en hembras que se encuentren en el último tercio de gestación.
Farmacocinética:
Los análogos adrenocorticoides sintéticos, incluida la betametasona, son efectivos por vía oral. Los niveles plasmáticos de betametasona alcanzan los valores máximos a las 2 horas de administración oral y luego disminuyen gradualmente durante las 24 horas. Se detectaron concentraciones medibles de betametasona en sangre a los 20 minutos. La vida media de eliminación de la betametasona después de la administración de una dosis única varía de 180 a 220 minutos hasta más de 300 minutos. Los glucocorticoides naturales y sintéticos, incluida la betametasona, se metabolizan en el hígado. En los pacientes con enfermedad hepática la depuración de la betametasona fue más lenta que en los sujetos normales. El nivel de corticosteroide biológicamente activo parece estar más vinculado al corticosteroide no ligado que a la concentración plasmática total del fármaco. No se ha demostrado una relación entre el nivel de corticosteroide en sangre (total o no ligado) y los efectos terapéuticos, dado que los efectos farmacodinámicos de los corticosteroides persisten más allá del período en el que resultan medibles en plasma. Mientras la vida media plasmática de la betametasona es ³ 300 minutos, la vida media biológica es de 36 a 54 horas.